“Yo ya sé a dónde vamos”, dice Aitana; “veo cómo nos movemos”,
responde ante la perplejidad del adulto que la acompaña.
“¿Sí? ¿Sabes hacia dónde gira el planeta?”
“Claro, mira las nubes en el cielo. Van para allá; y nosotros, para allá”,
afirma a la vez que extiende el brazo.
Aitana tiene cinco años recién cumplidos. Se mueve en el espacio y en el tiempo y provoca la reflexión de quien la escucha. Su mente está activa mientras modela con barro en la escuela y mientras colabora en las actividades familiares. Aunque su mundo es todavía limitado, ella percibe cambios y expresa los …