La apuesta por una enseñanza de competencias implica un cambio complejo en las formas de enseñanza y aprendizaje, así como en la organización escolar, en la formación del profesorado y, por supuesto, en las formas de evaluar. Las competencias, como sabemos, consisten en la intervención eficaz ante una situación concreta, en la que intervienen de forma conjunta e interrelacionada conocimientos, habilidades y actitudes. Esta definición implica, por un lado, la dificultad para evaluar tres tipos de contenidos de distinta naturaleza y, además, aplicados de manera interrelacionada par…
Contenido solo disponible para suscriptores
Accede a este artículo individual por solo
59.31$ IVA incluido
Descubre todo nuestro contenido sin límites
¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión